Nos llamaban niños del cementerio. Oficialmente destacamento de vigilancia de la trinchera K-745, la cual atravesaba los restos de un antiguo y extenso cementerio. Allí, entre los restos humanos en descomposición, los mausoleos derruidos y los cráteres llenos de fango sobrevivíamos, aguantando día tras día las andanadas de mortero con un estoicismo solo propio de los hijos de krieg.
El cementerio era un cubil de enfermedades, desde la podredumbre que emanaba de los muertos que habían sido desenterrados por las bombas hasta los fétidos icores que nos llegaban desde la tierra de nadie. Allí donde nadie se atrevía a aventurarse para retirar los cadáveres florecían ecosistemas de hongos y moscas que salpicaban la moribunda tierra de vivos y venenosos colores. Nosotros aguantábamos día tras día el momento de atacar o de ser atacados, de morir o matar, y honrar a Thánatos una vez más, sin embargo nunca se nos concedía tal dicha, llevábamos meses sin ver al enemigo, solo sabiendo de su existencia por las continuas descargas de artillería hasta que, un día, cesaron.
Durante unos minutos no se oyó nada, después fueron horas , y luego días. El mando envió aeronaves de reconocimiento, las cuales informaron que todas las posiciones del enemigo habían sido abandonadas. El calculo estimado de fuerzas herejes había sido estimado en casi dos millones de combatientes. Tras un tiempo de espera, se nos ordenó avanzar. Realizando un avance disperso a través de las llanuras castigadas por la guerra entramos en las posiciones enemigas a bayoneta calada, pero nada, ni tan siquiera las ratas habitaban en esas trincheras. Proseguimos nuestro avance dejando atrás las trincheras de primera linea, adentrándonos en las mejor construidas trincheras de comunicación y tampoco dimos con el enemigo. Nuestros escáneres tampoco daban con ninguna huella de calor ni con ningún rastro que indicase donde podrían haber ido.
Al segundo día, tras haberse adentrado en las líneas enemigas casi tres cuartas partes del regimiento, la tierra crujió y enormes y violentos temblores sacudieron a nuestras fuerzas. El suelo se abrió, y del subsuelo emergieron batallones de tropas enemigas que atacaron a nuestra retaguardia, ocupando las trincheras que horas antes habían estado vacías, mientras que la artillería enemiga volvió a entonar su sonata infernal, rociando con una mortal lluvia de proyectiles nuestra vanguardia. ahora todo tenía sentido, habíamos caído en una trampa magníficamente orquestada en la que, mientras nuestros confiados camaradas avanzaban por la superficie, el enemigo se refugiaba en el subsuelo, y ahora, estábamos atrapados entre la espada y la pared, una cortina de fuego al norte, y las trincheras llenas de enemigos al sur. Las ordenes del mando fueron claras, recuperar las trincheras a cualquier precio.
Sin una queja, el único sonido que se oyó a lo largo de todas las posiciones ocupadas por las tropas del 501 fue el chasquido de los cargadores al insertarse en los fusiles, el zumbido de las mochilas de plasma, y el activador de los lanzallamas al encenderse, al fin, tendríamos una oferta digna que ofrecer a Thánatos al final del día. Avanzamos apareciendo como espectros a través de la neblina de la mañana, con nuestras casacas rojas y nuestras mascaras símbolo de la muerte. cuando entramos en la linea de tiro enemiga comenzó la orquesta. Las ametralladoras entonaron su canto infernal mientras que los aullidos de los morteros hacía la vez de coros. Nuestros camaradas caían descuartizados, otros nunca verían otro día, pero avanzamos. A cada paso que dábamos mas hombres caían sin embargo nuestra férrea determinación nos hacia proseguir. 200, 100, 50 metros nos separaban. avanzábamos usando los crateres de cobertura, y al estar a la distancia suficiente lanzamos las granadas. Bayoneta en mano, entramos descargando la rabia acumulada de meses hacinados en trincheras insalubres, de ver a nuestros camaradas morir, y de estar perdidos en un mundo de mierda dejado de la mano del emperador.
Pese a perder un 60% de la fuerza de combate en el camino hacia las trincheras no importó. recorrimos las lineas enemigas abriéndonos paso a fuego y sangre, degollando, mutilando y matando a todo lo que se nos ponía por delante. Las heridas no importaban. Todos contábamos con cortes, magulladuras y algún hueso roto, pero eso sería preocupación de mas adelante, ahora lo único que importaba era honrar a la muerte y ocupar esas malditas trincheras, al fin y al cabo eramos krieg, y las trincheras eran nuestro hogar. Tras 3 horas de sangrientos combates recuperamos las lineas y aniquilamos al enemigo. Examinamos las cavidades subterráneas donde se habían escondido los herejes y descubrimos que eran zulos excavados a unos 4 metros bajo la superficie que se comunicaban con el exterior por medio de unas rampas hidráulicas. El reducido tamaño de estos contrastaba con la gran cantidad de enemigos que habían emergido, se me hacia difícil la idea de que alguien pudiera aguantar tanto tiempo escondido en unas condiciones como aquellas, así que tras incinerar el interior re acondicionamos las trincheras para usarlas nosotros. Todo había sucedido en un intervalo de apenas 10 horas de acción, en las que habían muerto casi 5000 de nuestros hombres, para avanzar unos 2 km las posiciones. pero las trincheras habían sido tomadas, las ordenes cumplidas y habíamos honrado al emperador.
¡POR KRIEG Y POR EL CAMARADA EMPERADOR!
(Esto ha salido de una mañana escuchando black sabbat que se ha juntado con las ganas que tenía de escribir algo, ¡espero que os guste!)
¡Por el camarada emperador!
jueves, 10 de septiembre de 2015
jueves, 28 de mayo de 2015
“El orgullo que se alimenta con la vanidad acaba en el desprecio”
Informe de batalla a 1000 puntos: cuervos sangrientos-501 de krieg
“El orgullo que se alimenta con la vanidad acaba en el desprecio”
Cuando recuerdo las playas de Thalasse siempre me vuelve aquella
pregunta que me hacía una y otra vez ese nefasto dia, ¿Cómo hemos llegado a
esto? Me preguntaba conforme las barcazas repletas de marines espaciales se
acercaban a la playa “no somos traidores, ¿tanto ciega el orgullo a los
hombres?”. Todo se remonta a unas semanas atrás, cuando el 501 del pueblo de
krieg fue destinado a combatir junto a varios efectivos del capítulo de los
cuervos sangrientos en la pacificación del mundo tropical de Thalasse-14.
Esperabamos con ansias entrar en combate con los todopoderosos marines
espaciales, lo que a nuestros ojos eran
el pináculo del dominio de la ciencia sobre la oscuridad de la ignorancia. Pero
lo que nos encontramos al llegar a la zona de conflicto fue algo muy distinto.
Seres fríos, fanáticos y con un total desprecio por la vida humana, habiendo
sido cegados por su orgullo, habían olvidado que ellos fueron una vez humanos.
No pudiendo tolerar las masacres indiscriminadas contra civiles, el alto mando
del regimiento decidió parlamentar con los líderes de los marines. De lo que
pasó en aquella reunión a puerta cerrada nunca lo sabremos, pero cuando el
mayor, junto a la cúpula del regimiento volvió a nuestros acuartelamientos, las
ordenes fueron muy claras, los marines espaciales se habían convertido en
nuestro enemigo.
Dias después, tras una serie de ataques a patrullas marines, allí estaban,
dispuestos a cobrar su venganza en sangre en aquella idílica playa. Conforme
desembarcaron ocuparon varios puntos clave, una escuadra táctica en el
promotorio oeste, una escuadra de devastadores en el promotorio centro, dos
vehículos, un transporte rhino y un whirwind en la parte central de la playa, y
una escuadra de motocicletas al este.
La iniciativa estaba de nuestra parte, habíamos preparado las defensas
de la playa, así que conforme el enemigo desembarcó, nuestro leman russ
executioner abrió fuego a la escuadra de devastadores, aniquilando a dos de
ellos; el pelotón avanzó a ocupar un sector de trincheras, un objetivo
estratégico, mientras que la escuadra de mando del regimiento, dirigida por el
mayor en persona, se apostaba a cubierto del fuego enemigo. En el lado oeste,
los granaderos montados en un transporte chimera realizamos un avance para
ocupar el punto estratégico 6, al mismo tiempo que abría fuego hacia la
escuadra de marines espaciales situada en el promotorio oeste.
La respuesta de los marines fue devastadora. El whirwind disparó sus
misiles mortales sobre la escuadre de mando del regimiento, aniquilando al
oficial de intendencia y a varios camaradas de la guardia regimental; los
devastadores, pese al impresionante blindaje frontal del leman russ,
consiguieron inutilizar el cañon principal con sus cañones laser, dejando al
monstruo de acero solo con sus barquillas y el cañon laser frontal. Las
motocicletas cazaron a la escuadra de mando acribillandola con los bolteres y
cargando contra ella. El mayor consiguió desmontar a dos marines, sin embargo
al observar alrededor se percató de que estaba solo y se vió forzado a
abandonar el combate, siendo perseguido y arrollado por la motocicleta
restante. Un rugiente rhino aceleró para desembarcar en las narices del pelotón
una escuadra de marines espaciales que descargaron una andanada de fuego bolter
segando las vidas de nuestros camaradas, que poco podían hacer frente a los
proyectiles autopropulsados bolter.
Asimismo, los devastadores supervivientes orientaron sus cañones laser
hacia el leman russ, que pese a ofrecerles solo su blindaje frontal encajó un
impacto superficial.
Los granaderos desembarcamos del chimera a corta distancia de la
escuadra de marines, derrochando fuego laser sobrecargado en venganza por
nuestros camaradas caídos, y aniquilando a la escuadra enemiga. En el centro de
la batalla, el pelotón, ya repuesto de las bajas sufridas, se acercó a
distancia de asalto de la escuadra enemiga y recibió la orden primera línea,
segunda línea, así que saturó de fuego laser a los marines, los cuales sin
embargo solo sufrieron 3 bajas. El leman russ intentó disparar a las
motocicletas, sin embargo debía tener el sistema de puntería dañado, ya que no
consiguió acertar ningún tipo de impacto.
Los marines por su parte volvieron a castigar al pelotón con fuego
bolter, pillandolo al descubierto y causando la muerte de 7 camaradas. Las
motocicletas rodearon al leman russ, disparándoles con los rifles de fusión,
destrozando sus orugas y causándole fuegos internos, que dejaron al gigante
inutilizado. La batalla pintaba mal, pero nuestra escuadra aun estaba fresca y
lista para el combate, aun había esperanzas, o eso pensábamos cuando el
whirwind enemigo decidió que no fuera así. Una devastadora lluvia de fuego se
abatió sobre nosotros, aniquilando a la mayor parte de la escuadra, dejándonos
vivos al ametrallador y a mi. Para empeorar aun mas la situación, una escuadra
de exterminadores se teleportó tras los supervivientes del pelotón,
acribillándolos sin piedad.
La batalla estaba acabada, los pocos supervivientes intentábamos
escapar, siendo perseguidos por los iracundos marines. Les habíamos
subestimado, nos habíamos atrevido a plantarles cara en un terreno abierto y
habíamos pagado nuestro error en la sangre de nuestros camaradas. La madre
patria no olvidaría esta afrenta, y el 501 se pagaría cada camarada muerto en
la sangre de marines espaciales.
Nota del autor: Desgraciadamente mi antiguo ordenador ha resultado infectado por un virus caótico y ha tenido que pasar varios meses en el medicae del regimiento, sin embargo ya hemos vuelto a la carga, así que una vez mas...
¡POR KRIEG Y POR EL CAMARADA EMPERADOR!
viernes, 27 de marzo de 2015
Ponzoña en el desierto.
Partida jugada a 1000 puntos. Korps de Krieg
vs Eldar oscuros
Dicen que se les denomina desiertos desde
tiempos perdidos en el olvido por estar vacíos de vida, sin embargo, ese día,
los desiertos de Tair Kal bullían de una actividad tremenda. Hombres y máquinas
del 501 de Krieg habían sido movilizados al mundo desértico para acabar con
unos misteriosos incursores que en un periodo de meses habían atacado todas las
refinerías de Promethium, llevándose únicamente a los trabajadores de las
instalaciones.
Tras
su despliegue en las principales refinerías y espacio puertos del planeta, el
501 se lanzó a una búsqueda sobre el terreno de los incursores, siguiendo el
rastro de refinerías atacadas. Finalmente, tras semanas de dura marcha en el
abrasador polvo del desierto, las unidades de exploración del regimiento
localizaron movimiento enemigo en una zona rocosa situada en el hemisferio
norte del planeta. Con el enemigo localizado,
el mayor Sergei Timoshenko movilizó a la primera kompanie bajo el mando
del Hauptmann Grigori Smirnoff a embolsar a los incursores, la caza había
comenzado.
Con las primeras luces del día, el grupo de
asalto del 501 se dirigió al emplazamiento enemigo realizando un despliegue de
abanico, con el flanco derecho cubierto por un tanque de batalla Leman russ
variante ejecutor, el centro cubierto por un pelotón dirigido en persona por el
Hauptmann Grigori Smirnoff y el flanco izquierdo en el que estaba situada una
escuadra de granaderos montados en un storm chimera (variante del chimera con
un cañón automático montado en la torreta), en la retaguardia un vehículo de
artillería autopropulsada modelo Basilisk.
El grupo de ataque desplegado y en formación.
Al contar con el elemento sorpresa, la
iniciativa durante el primer turno de la batalla correspondió a los Krieg del
501, quienes pillaron a los incursores, de los cuales no quedaba ya ninguna
duda que se trataba de eldars oscuros, por sorpresa. Aprovechando esto,
Smirnoff ordenó a su pelotón avanzar rápidamente al noreste, con la intención
de ocupar una serie de cráteres en los que atrincherarse, prefiriendo correr a
disparar al enemigo. El storm chimera a su vez, avanzó en línea recta para
situarse al lado de una formación rocosa mientras disparaba con todas sus armas
a las motocicletas a reacción de los eldars oscuros. Los granaderos
desembarcaron y corrieron para tomar una posición estratégica a los pies de la
formación rocosa. El leman russ, efectuó un ligero movimiento para centrar su ángulo
de tiro en las fuerzas de los incursores eldar, descargando una lluvia de
plasma sobre los ponzoñas, quienes esquivaron todos los impactos habilidosamente.
Los artilleros del basilisk dispararon hacia los ponzoñas también, sin embargo,
al no tener línea de visión el tiro se desvió demasiado, no causando ningún
daño importante.
Granaderos desembarcando para ocupar la posición estratégica.
Los eldar a su vez, repuestos ya de la
sorpresa del ataque, se lanzaron rápidamente al combate, los ponzoña y las
motos a reacción situados al oeste, abrieron fuego concentrado sobre la
escuadra de granaderos, los cuales perecieron casi en su totalidad, manteniendo
sin embargo en la posición gracias a la férrea disciplina inculcada desde la
niñez en todo hombre de Krieg. Los ponzoña situados al este, habiendo esquivado
los disparos del leman russ, no pudieron mover en un rato, al contrario que las
motos situadas cerca de ellos, quienes avanzaron en línea recta para flanquear al
tanque imperial. A su vez, para ponerles las cosas más difíciles al 501, un
caza estilete apareció de la retaguardia enemiga, bombardeando las posiciones
ocupadas por el pelotón de Smirnoff, provocando graves bajas en la unidad, sin
embargo, algunos hombres pudieron volver al combate gracias a los cuidados de
la enfermera de la Kompanie, Irina petrolenko.
Leman russ fijando como objetivo las motos, las cuales se hallan bajo cobertura.
Durante el segundo turno del combate, el
storm chimera, al verse rodeado de vehículos enemigos, abrió fuego contra los
ponzoñas, acribillando a uno, sin embargo, el ponzoña restante y las
motocicletas dispararon al chimera, quien quedó con graves daños internos, pero
aun capaz de aguantar un turno mas. Los restantes granaderos abrieron fuego
rápido con sus rifles laser sobrecargados sobre una escuadra de 5 guerreros
eldar oscuros, aniquilando a 2 de ellos y forzándolos a retirarse. Por otro
lado, el pelotón de Smirnoff concentró sus descargas de
rifle laser en los grupos de guerreros necrones comandados por sybarites que
habían desembarcado de los ponzoñas, aniquilando a la escuadra enemiga. Con los
cañones de los rifles aun humeantes, los soldados de Smirnoff tuvieron que
hacer frente a un nuevo enemigo, un transporte eldar oscuro, el cual
transportaba al comandante Xenos y su siniestra escolta de íncubos
Transporte Xenos apareciendo de la nada.
.
Al este las cosas tampoco pintaban mejor, el
leman russ fue rodeado por los ponzoñas y los guerreros xenos que desembarcaron
y dispararon, asestando varios golpes mortales a la venerable máquina de
guerra, para después centrar su ataque en el pelotón del Hauptmann Smirnoff, el
cual se encontró rodeado por el ponzoña superviviente, las motocicletas, y las
fuerzas xenos provenientes del este. Embolsado por las fuerzas enemigas, el
pelotón aguantó un intenso fuego enemigo y se vió forzado a retirarse del campo
de batalla.
Las fuerzas del 501 se ven rodeadas.
Desolados, los supervivientes vieron como los
incursores desaparecían entre el polvo levantado por los combates, volverían, y
esta vez con una mayor determinación. El 501 de krieg había sido retado, y por
la madre patria que aquellos xenos pagarían por ello.
CONCLUSIONES:
Bueno, esta ha sido una de mis primeras
partidas con los korps más allá de la teoría, y he de destacar una serie de
puntos que voy a ir explicando uno por uno:
-Granaderos: los granaderos son una mezcla
entre veteranos y karskin que ofrece el codex krieg, tienen HP4 HA4 (común en
todas las tropas krieg), salvación a 4+, y pueden equiparse con rifles laser
sobrecargados, aparte de una interesante sección de armas pesadas y especiales.
Hablaré con el mando del regimiento, necesito mas de estos muchachos, y lo mas
importante, necesito saber usarlos bien.
-Pelotones: una opción muy barata y que puede
hacer perfectamente de tapón, enredando a tropas del enemigo y obligándoles a
perder turnos.
Espero que os haya resultado interesante el
post, intentaré subir un informe cada semana a partir de ahora, y comentad todo
lo que veáis, asi me ayudáis a que esto salga adelante. Desde aquí se despide
Sergei Timoshenko, Käpitan del regimiento 501 del pueblo de krieg.
sábado, 14 de marzo de 2015
El recluta llega al cuartel.
Cuando empecé a sondear la idea de empezar con un ejército
de los korps de la muerte de Krieg, lo primero que se me vino a la cabeza fue
una larga sucesión de imágenes de soldados embarrados y enmascarados, luchando
a lo largo de kilométricas líneas de trincheras (algo que, personalmente me
apasiona. Sin embargo, viendo la oscura escala de colores que caracteriza estas
fantásticas miniaturas, y el indudable carácter de soldados alemanes que desprenden,
me dije a mi mismo, ¿Por qué no darle un enfoque completamente distinto? y así
nació el 501 ejército del pueblo krieg. Unos korps a los que decidí darles una
fuerte inspiración comunista, vistiéndolos de rojo y enarbolando la hoz y el
martillo, al fin y al cabo, en un recóndito y cruel futuro en el que solo hay
guerra, ¿Quien va a fijarse en cómo se administre cada mundo, mientras que
pague sus diezmos y sus tropas sirvan al emperador?
Conforme el tiempo ha pasado y he podido reunir las suficientes miniaturas para poder jugar escaramuzas (a dia de hoy llego pelado a los 1000 puntos), animado por varios compañeros que alababan la estética de mi ejercito pensé, ¿Y si hago un blog? pero, ¿que tipo de blog? uno narrativo, donde cuento las batallas de mi querido 501, ¿o simplemente un blog de informes de batalla?. Al final tomé la decisión de crear un blog donde, de manera narrativa cuento las luchas en el tablero, sin embargo, aunque emprendo el proyecto con muchas ganas, viendo la inmensidad de blogs, páginas, canales de youtube, y un largo etcétera de sitios similares en internet, verdaderamente me siento como un recluta recién llegado al cuartel.
Espero que este sea el primero de muchos post, a partir de ahora esperos veros por aquí a cada informe/relato que suba al blog, ¡hasta la próxima!
¡Por el pueblo! ¡Por krieg! ¡Por el camarada emperador!
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